Después de que más de 10.000 personas desfilaran por la capilla ardiente de Rocío Jurado instalada anoche en el Santuario de Regla de Chipiona (Cádiz), a mediodía ha tenido lugar el funeral por la cantante, oficiado por el obispo de Jerez, Juan del Río, en el Santuario, atestado de gente. Uno de los momentos más emocionantes ha sido cuando el féretro abandonaba la iglesia en medio de un atronador aplauso a hombros de familiares y en primer término podía verse al viudo de la artista, José Ortega Cano, y a su hermano Amador Mohedano.
Tras la ceremonia religiosa, la tonadillera ha sido enterrada en la intimidad en el cementerio de San José.

En los primeros bancos de la iglesia se han sentado la hija de la fallecida, Rocío Carrasco, el viudo, José Ortega Cano, y su hermano Amador Mohedano, junto con numerosos familiares de la cantante y amigos que se han acercado a dar su último adiós a la chipionera más universal. Entre ellos estaban el cantante Julio Iglesias y su esposa Miranda, el torero Curro Romero y su mujer Carmen Tello, y los componentes de Los Marismeños, quienes han interpretado una salve rociera antes del comienzo de la misa, lo que ha causado una gran emoción a muchos de los asistentes al sepelio. Además de representantes del mundo de la canción, del periodismo y de la cultura, ha asistido al acto la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, en representación del Gobierno de la nación.

Las miles de personas que no han podido entrar en el Santuario se han congregado, bajo un sol de justicia, en los alrededores de la iglesia a la espera de que saliera el féretro con los restos mortales de Rocío Jurado. El ataúd ha abandonado el Santuario de la Virgen de Regla a hombros de familiares de la tonadillera, cubierto por las banderas de Andalucía y de España, y en medio de un atronador aplauso, que se ha hecho aún más intenso cuando los congregados han visto que entre los familiares que cargaban el féretro destacaban, en primer término, José Ortega Cano y Amador Mohedano. Tras salir de la iglesia, el féretro ha sido recogido por costaleros de la Hermandad de la Virgen de Regla, de la que Rocío Jurado era muy devota.

Agentes de la Guardia Civil y voluntarios de Protección Civil han custodiado el Santuario, junto a un helicóptero que sobrevolaba la zona para garantizar la seguridad de los presentes. Chipiona vive hoy la segunda de las tres jornadas de luto decretadas por el Ayuntamiento y muchos comercios están cerrados, aunque los bares han abierto sus puertas para avituallar a los numerosos ciudadanos anónimos y reporteros que estos días han viajado hasta el municipio. Mientras, la casa de la cantante en Chipiona, Mi abuela Rocío, continúa llena de mensajes de cariño, flores, velas y estampas de la Virgen de Regla.