sábado, 25 de julho de 2009

Madonna conquista a los famosos madrileños

y aos Matosinhenses también!
:-) Viva a Ryanair e os seus bilhetes baratos: Ida e volta com taxas: €31 (ir a Lisboa de Alfa custa €48!!!)

La infanta Elena se rinde al ritmo de Madonna. Luis Medina (e eu não o vi!!!!), Arancha de Benito, Guti y Soraya, entre otros, acudieron al concierto de la cantante en el Vicente Calderón, en Madrid.

Diecinueve años (já cá veio mais vezes e ainda eu me queixo) , y se dice pronto, han tenido que esperar sus fans para verla de nuevo en Madrid y por eso, en el estadio Vicente Calderón, no faltó ninguno de sus incondicionales (nem mesmo a Fofocas!!). Madonna acudió a su segunda cita con el público español (la primera fue en Barcelona el pasado martes) con energía y sus grandes temas bajo el brazo, dispuesta a conseguir que, quien más y quien menos, se moviera a su ritmo.
Con su inconfundible body negro y su sombrero de copa, símbolos de esta gira Sticky & Sweet, sentada en su trono de reina y con los acordes de Candy Store sonando de fondo, hizo su entrada la artista que demostró, una vez más, que la edad no está reñida con una buena forma física. Aunque el estadio no se llenó por completo (el precio de las entradas oscilaba entre los 100 y los 400 euros - valeu todos os cêntimos), los que acudieron aplaudieron y bailaron sin parar (de tanto que dancei ainda me doem todos os músculos do meu corpo de sereia).


Entre el público se descubrieron muchas caras conocidas como la infanta Elena, vestida de modo cómodo (não sei como aguentou com esta roupa,estava um calorão!) y con un semi recogido con bucles con el que estaba muy favorecida. El tenista Feliciano López, Gonzalo Miró, Luis Medina (aiiii!!!!) y la cantante Soraya tampoco se quisieron perder el espectáculo. El futbolista del Real Madrid, Guti, coincidió con su ex mujer Arancha de Benito, con la que mantiene una cordial relación, y con Alejandra Rojas y Eva Amaral que también estaban entre el público.

A los fans aún les queda una oportunidad para ver a Madonna, el día 25 en Zaragoza, aunque habrá que esperar hasta septiembre para tener en las manos su primer recopilatorio en treinta años de carrera, Celebration.

Madonna no Vicente Calderón - Critica do El País

(Depois de alguma reflexão só queria dizer em 1º lugar que sou suspeita, pois todo o planeta sabe que eu penso que "Deus no céu e Madonna na terra", mas acho que este senhor jornalista não deve ter estado no mesmo concerto que eu)

Ora vê-se bem que este deve ter sido o 1º concerto que este senhor jornalista já viu da Madonna.

Tivesse o "periodista" vindo à Belavista em Setembro passado e era feita a pior crítica de um concerto: a pior critica jamais escrita!

Em Setembro odiei o sítio do concerto, odiei as pessoas que estavam à minha volta que não se divertiram e não dançaram, odiei não ter visto nem o concerto nem a Madonna, odiei a falta de organização, odiei a frieza e a péssima comunicação com o público da Madonna e vem-me este caramelo dizer mal da Madonna mais simpática e faladora que já vi!!!

Ó espanholito, o que queres? Que a Madonna fale em espanhol do principio ao fim e se ponha a chorar emocionada qual Rocio Jurado???

"Joder", espanholito de mierda!!!

aguardem fotos minhas do "ibento"


Ya se sabe que la soltería disipada casi siempre refuerza la creación. Cuentan los madder, seguidores de Madonna que analizan su música y cada abrir y cerrar de ojos de la cantante, que cuando está sin pareja hace sus mejores discos y sus más alucinantes actuaciones. Que se sepa ahora no tiene acompañante y aun así le está costando trabajo convencer con la gira de Sticky & Sweet (dulce y pegajoso), cuya segunda vuelta recaló ayer en el estadio Vicente Calderón. Ayer sólo lo hizo a ratos.
Las entradas costaban entre casi 100 euros (de pista) y 400 las 'supervip'
"Esto parece un vídeo de Eva Nasarre a lo bestia", decía una espectadora
Madrid no le respondió con un lleno. Los poco más de 35.000 asistentes (de los 50.000 que entran en el estadio), dejaron bastante espacio libre, mientras la zona de las invitaciones estaba llena. Quizá sea por el ostracismo en el que la cantante ha mantenido a la capital en la que no había actuado en 19 años [no 10, como se publicó ayer por error]. O tal vez porque las entradas costaban entre casi 100 euros (de pista) y 400 las supervip. Suena más fiable lo segundo.
Lo que sí es cierto es que sus conciertos se han convertido más en un acto social que un acontecimiento musical. Puede ser el único sitio del mundo en el que puedan coincidir Belén Esteban -"Yo la sigo desde los ochenta", decía la reina de corazones a este periódico antes del concierto- y la infanta Elena -de la que no tenemos declaración, pero a juzgar por cómo bailaba suponemos que también es fan-. Aunque cuando empezó el espectáculo, a las 22.00 horas en punto, sólo hubo miradas para la otra reina: la del pop.
Madonna subida a su trono surgió de un cubo eléctrico a ritmo de Candy Shop. Bajó unas regias escaleras y soltó el "buenas noches, Madrid" de rigor. Estalló la locura. Aunque por poco tiempo. El público tardó en arrancar; por mucho que la cantante mostrase su reluciente cadillac blanco, o sacase su guitarra eléctrica para poner pose de rockera (sólo eso, pose) con Human Nature.
Hasta la cuarta canción el público no le cogió el rollo. Pero claro, era Vogue, con la que hasta la infanta se pegó unos bailes. Madonna luce una musculatura que ya querrían muchas señoras de 50 años. Incluso en el gimnasio de Poli Díaz. Porque eso sí, a estética, baile y a espectáculo pocos la pueden superar. Con matices: Madonna, como hizo ayer, puede saltar a la comba vestida de colegiala y deslizarse por una barra americana con bastante arte; puede encerrarse en una jaula, en plan dominadora mientras una pantalla la encierra con una espectacular cascada; puede reclutar a un grupo de bailarines y marcarse una discutida y algo extraña fiesta gitana en el centro del escenario. Pero ella es capaz de hacer cosas mejores. La prueba es que lo ha hecho en el pasado.
Y aunque pocos se fueron defraudados con el montaje escénico, lo de ayer fue extraordinariamente discretito. Le faltó esa emoción y esa vibración que te remueve por dentro y que la ha convertido en estrella. En 2009 a Madonna le salvan los clásicos (Holiday, Music, Like a Prayer...), incluso los ajenos. Con los acordes de Billie Jean, de Michael Jackson, parecía que encendería al público pero el momento fue un coitus interruptus. Y aunque Madonna intentó dejar claro que Michael fue "el mejor artista del mundo", el homenaje, con bailarín incluido, sonó a trámite.
En la parte final Madonna remontó el vuelo el electrónico Ray of Light que interpretó con la guitarra eléctrica. ¿Estaría enchufada? "Da iguaaaal", respondía un aguerrido fan que no paró de bailar en toda la noche. También había opiniones enfrentabas: "Esto parece un vídeo de Eva Nasarre a lo bestia", decía otra espectadora. Los dos se pusieron a bailar en el mismo momento que sonó Give it 2 me, una de sus últimas mejores canciones. Con ella terminó un concierto con gran final pero que sólo fue vibrante a ratos.
Quizá éste sea el momento perfecto para que Madonna se vuelva a reinventar (otra vez), pero la publicación a finales de septiembre inminente de un disco de grandes éxitos (con pocos temas nuevos) no parece la mejor señal. Habrá que esperar.
FE DE ERRORES
Madonna no interpretó anoche en Madrid la canción Like a Virgin, como por error se decía en esta crónica

(BURRO, nem atento estavas, merdoso!)

terça-feira, 21 de julho de 2009

estou aqui até sexta à noitinha


volto para ir para a Praia no fim de semana e esquecer a semana mais louca e incrivelmente indescritivel que tenho memória (pareço uma intelectual de meia tigela a falar mas não quero ser demasiado clara). O J. já está à minha espera, é bom reencontrar velhos amigos.
Que a Madonna me ponha "up", como só ela sabe, há 25 anos. Sticky and Sweet beijinhos a todos.

segunda-feira, 20 de julho de 2009

Madonna tenta fugir dos paparazzi saindo de hospital pela porta de trás





Madonna tenta fugir dos paparazzi saindo de hospital pela porta de trás
A cantora foi visitar os operários que ficaram feridos após o desabamento de seu palco em Marselha . Madonna bem que tentou, mas não teve sucesso em despistar os paparazzi durante a visita que fez neste domingo, 19, aos operários que ficaram feridos após um acidente durante a montagem de seu palco no estádio Velodrome em Marselha, na França.
A cantora deixou o local pela porta de trás, mas não conseguiu fugir das multidão de fotógrafos, fãs e curiosos. Antes de ir encontrar os feridos, a estrela ainda visitou a família de um dos dois mortos no incidente. Ela levou flores e emocionou os familiares dele.
Acompanhada de parte da equipe e dos filhos, a cantora desembarcou no aeroporto local. A cantora se disse "devastada" com o acidente, que levou a morte de duas pessoas, e fez uma homenagem emocionada durante apresentação na Itália.
Gostei de ver a Deusa no meio do entulho e dos caixotes de papel. Não há nada que a incomode!
E a quantidade de pessoal que ela leva com ela... Seguranças, nannies e mais os 4 filhos...!