Renée Zellweger ha sorprendido en su última aparición por su extrema delgadez. Con esta estilizada figura lució la actriz en la gala Hampton Social que tuvo lugar en la ciudad de Nueva York, donde pudimos comprobar los efectos de la estricta dieta que ha seguido. Renée vestida con un minivestido gris que marcaba aún más su nueva figura, tuvo que engordar más de diez kilos para su papel en Bridget Jones -trabajo nada fácil, según comentó ella misma- y como no quiso mantener estas curvas, decidió ponerse en manos de un entrenador personal y de un nutricionista que la hicieran recuperar su peso anterior. Pues bien. a juzgar por las imágenes podemos afirmar que lo ha conseguido con creces.
Preferia a Bridget Jones...
Sem comentários:
Enviar um comentário